La técnica para tallar en piedra posee cierta complejidad, pues existen varios factores que influyen en el proceso, cosas como el estado de la piedra, el tipo de piedra, las herramientas a utilizar y por supuesto la conexión de artista con el objeto oculto, ya dentro de la piedra el cual solo hay que encontrar. Esta técnica es bastante volátil en cuanto a conceptos y me refiero a los temas que se pueden tratar y desarrollar en escultura, es totalmente libre y sin limitantes, claro, teniendo un buen material, porque lo último que se espera es que la escultura se fragmente y se rompa.
El sujeto con el que desarrollaré este proyecto, el señor Tulio Castañeda (artista plástico de la localidad de Ramiriquí, Boyacá, Colombia – con puesto comercial en villa de Leyva, Boyacá, Colombia), que me ayudará a desarrollar el concepto de escultura como saber y como oficio cultural, en la búsqueda de conocimiento obtenido y por obtener a lo largo de ésta investigación.
Gran parte de las esculturas que están a su nombre, hacen un llamado a la reflexión y a la exaltación tanto del campesino como de su función en la economía del país, sin mencionar que la vida de las familias del campo, es precisamente el campo, y todo lo que la tierra les da. Incluso todas sus esculturas hablan sobre un oficio diferente, cada oficio es importante como parte histórica, cada herramienta usada, cada cosecha producida, como parte de las tradiciones que a nivel general o independiente, se mantienen vivas en el campo colombiano, pues a fin de cuentas, el campesino es el campesino y así mismo es parte de la historia, cada generación siguiente lo será.
Las esculturas a pesar de no poseer algún tipo de crítica política, (si se tienen en cuenta los conflictos que se han presentado con el gobiernos en los últimos años) su presencia escénica es destacable, podría decir que sus esculturas muestran lo mejor del campo y sus oficios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario