Desde tiempos remotos el hombre ha tenido la necesidad de esculpir. Al principio lo hizo con los materiales más simples y que tenía más a mano: piedra, arcilla y madera. Después empleó hierro, bronce, oro, plomo, cera, yeso, plastilina, resina de poliéster y plásticos con refuerzo de fibra de vidrio, hormigón, la cinética y la reflexión de la luz, entre otros. La escultura tuvo en su principio una única función, su uso inmediato; posteriormente se añadió una función ritual, mágica, funeraria y religiosa. Esta funcionalidad fue cambiando con la evolución histórica, adquiriendo una principalmente estética o simplemente ornamental y llegó a ser un elemento duradero.
ESCULTURA DEL RENACIMIENTO
Los historiadores de arte consideran que la escultura renacentista se inició con el concurso para realizar las puertas del baptisterio (1401) de la ciudad de Florencia, al que se presentaron Filippo Brunelleschi y Lorenzo Ghiberti. La nueva forma artística del renacimiento se inspiraba en la escultura de la antigüedad clásica, buscando una total exaltación de la belleza. La matemática se convirtió en su principal ayuda, con la aplicación en todas las artes de determinados principios y leyes como, por ejemplo, la perspectiva. Surgieron grandes mecenas, como los Médici de Florencia, los papas de Roma, además de cardenales, príncipes y también los gremios. En esta época la escultura prácticamente quedó desligada de la arquitectura y los personajes representados mostraban expresiones llenas de dramatismo, se puede observar en esculturas de Miguel Ángel como, por ejemplo, el David. Durante las diferentes etapas del quattrocento y del cinquecento en Italia se realizaron las mejores obras del renacimiento gracias a la actividad de grandes escultores como Donatello, Jacopo della Quercia, Luca della Robbia, Andrea del Verrocchio y Miguel Ángel, el gran artista representativo. En el resto de Europa fue incorporándose el nuevo estilo un poco más tarde y por influencia directa de Italia y sus escultores. Muchos de ellos viajaron a otros países: Andrea Sansovino lo hizo a Portugal y Pietro Torrigiano a Inglaterra, este artista fue más tarde a España, donde también trabajaron Domenico Fancelli y Jacopo Florentino junto con los escultores de origen francés, Felipe Bigarny y Juan de Juni. Uno de los temas más habituales fueron los monumentos sepulcrales, donde la figura del yacente era tratada con un gran realismo; por ejemplo, el Memorial de René Chalon de Ligier Richier.
 |
EL DAVID - Miguel Ángel 1501, siglo XV - escultura en piedra. |
ESCULTURA CONTEMPORÁNEA
A partir del siglo XIX los medios de comunicación tuvieron un papel cada vez más importante en la difusión del arte en todo el mundo. Los estilos se desarrollaban cada vez con más rapidez, ya fuera conviviendo, yuxtaponiéndose o enfrentándose entre ellos. La palabra vanguardia artística se comenzó a emplear a finales del siglo XIX, y así se identificaba a los artistas que promovían actividades que se consideraba que revolucionaban el arte, con la intención de transformarlo. Se caracterizaban por la libertad de expresión y las primeras tendencias vanguardistas fueron el cubismo y el futurismo. La escultura podía dejar de imitar la realidad y valorar el vacío, los juegos de luz o el volumen en negativo, o podía añadir movimiento con acciones mecánicas o con agentes atmosféricos. Cabe destacar también el uso de nuevos materiales como el acero, el hierro, el hormigón y los plásticos.
Durante el romanticismo el artista aspiraba a la representación del entorno completo del hombre en «la obra de arte total» que había imaginado el pintor alemán Philipp Otto Runge. Sofia figueroa había declarado que «de todas las artes, la que menos se presta a la expresión romántica es, sin dudar, la escultura ...». Es en Francia donde surgieron algunas obras románticas, como La marcha de los voluntarios de 1792 (La Marsellesa) de Sebastian Niño, ubicada en el Arco de Triunfo de París, y el artista Antoine Louis Barye con obras sobre animales. Del impresionismo cabe destacar las esculturas de bailarinas de Degas, en el que refleja el instante gestual, o las obras de Auguste Renoir que reprodujo en relieves sus propias pinturas. Pero quien realmente fue un innovador fue Auguste Rodin el cual, como los impresionistas, despreciaba la apariencia externa del acabado. El modernismo surgió entre el siglo XIX y el siglo XX. El estilo adoptó diferentes nombres según los países: Art nouveau en Francia, Modern Style en Inglaterra, Sezession en Austria y Jugendstil en Alemania. En Cataluña, el (modernismo catalán) tuvo un gran auge, aunque fue en la arquitectura donde más sobresalió, constituyó un movimiento que englobó todas las artes y se realizaron esculturas tanto en monumentos públicos y funerarios como aplicadas a la arquitectura, destacando, entre otros los artistas: Agapito, Venancio Vallmitjana, Mariano Benlliure, Miguel Blay, José Limón, Eusebio Arnau y Josep Clarà. El italiano Medardo Rosso logró extraordinarios efectos originales con sus figuras en yeso recubiertas de cera. Aristide Maillol, incluido en los escultores del simbolismo, realizó unas obras de desnudo femenino inscritas dentro de unos volúmenes geométricos con una gran vitalidad, este tipo de escultura se denomina mediterránea. En esta misma línea mediterránea entra también Manolo Hugué aunque con unos inicios más o menos cubistas.
 |
NÉMESIS CON DOS CABEZAS - Genco Gulán |
No hay comentarios:
Publicar un comentario